Día Nacional del Donante de Médula Ósea
Hace 11 años se creaba el Registro Nacional de Donantes de Células Progenitoras Hematopoyéticas del INCUCAI, celebrándose desde entonces, todos los 1° de abril, el Día Nacional del Donante de Médula Ósea.
Cientos de personas cada año, son diagnosticadas con enfermedades hematológicas, entre ellas, leucemia, anemia aplástica, linfoma, mieloma, errores metabólicos o déficit inmunológico. Para tratar estas enfermedades se puede recurrir al Trasplante de CPH (Células Progenitoras Hematopoyéticas), la que conocemos en nuestro idioma diario como Trasplante de Médula Ósea.
En contrapartida a lo usualmente conocido, solo un porcentaje que no llega al 30, encuentra en un consanguíneo, el donante requerido, motivo por el cual, se debe recurrir a un semejante no emparentado. Esta particularidad dio nacimiento al Registro Nacional, lugar donde los voluntarios se registran libremente.
Ser donante es algo muy sencillo y los requisitos, mínimos, obviamente estar sano, con la edad comprendida entre los 18 y los 55 años y contar con un peso mayor a los 50 kilos. Con estos parámetros en nuestro haber, nos acercamos a un Centro de Donantes, que funciona en el Servicio de Hemoterapia de un hospital habilitado (58 en nuestro país). Ahí podremos donar una unidad de sangre, momento en el cual un técnico habilitado nos indicará los ítems para completar la ficha de inscripción.
Al haber dado nuestro consentimiento, se tomará una pequeña muestra de la unidad de sangre donada y se procederá a efectuar sobre la misma, el análisis de su Código Genético (HLA). Estos datos serán ingresados a la base informatizada del registro. Las CPH solo serán donadas cuando un paciente la necesite y exista un 100% de compatibilidad con el Código Genético del donante.