Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino
Todos los 26 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino, con el objeto de puntualizar sobre la importancia de efectuarse controles ginecológicos para evitar enfermedades, entre las cuales se destaca el cáncer.
La segunda causa de muerte entre las mujeres de entre 35 y 65 años es el cáncer cervicouterino. En la Argentina se diagnostican aproximadamente 4.000 nuevos casos anuales y tienen final trágico unas 1.800 pacientes.
Increíblemente, la cura de la enfermedad se logrará el día en que la totalidad de las personas accedan a una plena educación. Es prevenible, pero su alta incidencia y mortalidad es por causa de la desigualdad social. La infección del Virus del Papiloma Humano (VPH), afectará al 80% de las mujeres a lo largo de su existencia y un 5% de los casos derivará en un cáncer cervicouterino. Los estudios básicos como el Papanicolau (PAP), el Test del VPH o eventualmente la Colposcopía, resultan clave para su detección precoz.
Efectuándose en forma periódica estos estudios, la enfermedad debería disminuir en un 80%, sin embargo, a pesar de ser gratuitos en los centros médicos públicos en la Argentina, aún no se ha logrado bajar sus incidencia y mortalidad. La falta de educación sanitaria y el escaso acceso a la información, resultan factores altamente protagónicos y su prueba sale a la luz, al conocer el resultado de una encuesta efectuada a tal fin en diferentes puntos del país, un 80% respondió desconocer que el VPH era el causante de este tipo de cáncer.
Resulta esperanzadora la iniciativa del Estado de implementar la vacuna contra la infección del VPH de forma gratuita para las niñas de 11 años. Los resultados se evidenciarán dentro de varios años. El desafío presente es concientizar a la población sobre el valor de la vacunación y los controles periódicos, pues resulta una certeza que la cura de la enfermedad se alcanzará, como se mencionó antes, cuando el acceso a la educación sea plena.